jueves, 31 de diciembre de 2009

El alfabeto

A: Alemania
B: balística
C: Cal
D: Deutiers
E: Expediente X
F: francesita
G: gas
H: heridas
I: incredulidad
J: judíos
K: Karabineros (policía)
L: lluvioso
M: Feliciano
N: número de serie
Ñ: ñapa
O: online
P: Puerto Fake
Q: quántico
R: restregó
S: Sophie
T: torr
U: ultimátum
V: víctimas
W: webcam
X: xanazina
Y: yacer
Z: zopenco

Cruze de historias


Sophie se despertó, se sentía rara en la cama y no podía dormir. Giró la cabeza para mirar la hora en el reloj de la mesita, eran las 6:45. Se levanto y abrió la luz para poder dar de comer a su rata Toby que aun dormía plácidamente en su jaula. Ella se levanto pensando dónde podía haber puesto su padre su diario, quería el diario para poder seguir investigando sobre la muerte de Wellington sin que su padre se enterara. Así que bajo a desayunar, su padre estaba sentado en la mesa tomándose un café de sobre con una ensaimada. Sophie le dijo buenos días, y él respondió lo mismo. Ella se dirigió a la nevera para coger un yogurt de fresa y sentarse en la mesa para comérselo, entonces su padre se levanto y le dijo que tenía la comida preparada en la nevera, y que solo tenía que ponerlo 2 minutos en el microondas y ya se lo podía comer, y luego su padre se fue.


Sophie espero a oír el rugido del Mercedes de su padre dirigiéndose a la oficina para poder empezar a registrar todos los lugares en donde su padre podía haber escondido su diario con las conclusiones que había sacado del caso Wellington. Empezó por el comedor, miro dentro de los armarios, debajo del sofá, detrás de la televisión, incluso dentro de un jarrón muy grande que había pero nada. Entonces paso a la habitación de su padre, donde le pareció que sería el lugar ideal para esconder su diario ya que ella tenía prohibida la entrada en la habitación de su padre.


Empezó mirando debajo de la cama y por las estanterías, y entonces pensó que el gran armario sería un lugar aún más ideal. Así que cogió una silla de la habitación y la acercó al armario. A primera vista solo vio ropa de su padre, y algunos vestidos de su última novia, así que decidió buscar un poco más adentro. Sophie encontró una cajita de color marrón con rayas amarillas, y pensó que su padre lo había hecho expresamente para que no se atreviera a abrirlo. Pero ella fue más fuerte de lo que había sido en toda su vida, y abrió la caja odiosa para poder recuperar su diario y seguir escribiendo.


La hipótesis fantástica

Un día cuando volvía de comer con Feliciano y Cal, estaba a dos calles de su casa y de pronto vio a muchísima gente en su calle, básicamente delante del hotel que estaba al lado de su bloque de pisos. Sophie se acercó a ver qué pasaba, y vio a muchísimas chicas llorando, con papeles, camisetas, tangas, y muchas más cosas en las manos, esperando a que alguien a quien no podía ver aun, les firmara un autógrafo. Ella subió a su casa con la intriga de no saber quien había, y de repente alguien toco el timbre de su puerta.


Sophie abrió sin preguntar antes quien era, y en 3 segundos estaba sonando el timbre de su puerta. Esta vez no abrió sin mirar, sino que abrió la mirilla y quedo perpleja. Como no se podía creer que fuera él, cerró la mirilla, se froto los ojos, y volvió a mirar. Esta vez ya no tenía explicación, era Brad Pitt, el guapísimo que siempre había visto en la televisión estaba tocando el timbre de su puerta, no se lo podía creer.


Sophie abrió tan rápido como pudo, y lo dejó entrar corriendo para poder volver a cerrar la puerta y que nadie se colara en ese momento tan especial para ella.


-Hola, supongo que ya debes saber quién soy, pero perdóname por entrar en tu casa así, lo siento mucho de verdad…-le dijo Brad a ella poniendo cara de chico bueno


-Sí que se quién eres, y ahora mismo me da igual la forma de la que hayas entrado, pero, ¿porque has entrado?


-Iba a mi hotel cuando he visto la cantidad de fans locas por comerme, y mis guarda-espaldas hoy no estaban conmigo porque se suponía que yo venía a relajarme y que nadie lo sabía, y antes de que se me comieran vivo he decidido entrar en tu casa.


-Ah, entiendo. Entonces antes de llamar a tus guardaespaldas y que te ayuden, ¿me puedes ayudar tu a mi?- ahora era ella la que hacía cara a buena chica

-Claro que sí, tú me has ayudado ahora me toca a mí. ¿Qué clase de ayuda necesitas?


-Me gustaría que te hicieras unas fotos conmigo, tranquilo que no las pasare a la prensa- sonrío ella pensando en Cal.


-¡Venga pos, allá vamos cámara!


miércoles, 30 de diciembre de 2009

¿Qué pasaría si mi personaje saliera del libro?

Sophie salió a pasear el nuevo perro que le había regalado Cal, un “golden retriever” de color negro de solo un mes de vida. Entonces el perro echo a correr como un loco por el parque en el que se encontraban, y Sophie tenía mucho trabajo en ir detrás de él, y entonces vio que el perro se paraba delante de una puerta ladrando con todas sus fuerzas. Ella se acerco, abrió la puerta y se quedo perpleja. Detrás de aquella puerta había el mismo parque, el mismo suelo, el mismo cielo pero diferentes personas, ella entro y tiro de la cuerda del perro al que ya había atado para que entrara con ella. Una vez dentro empezó a caminar por ese mundo que no era el suyo, sino que era una réplica con más cosas. Ella pensó que lo que le estaba pasando solo era un sueño, así que se cogió un poco de carne del brazo y la giro para ver si le dolía, y efectivamente no era un sueño.
Entonces ella decidió coger un taxi (ya que todo lo que había en la calle era eso) y pedirle que le diera una vuelta por esa ciudad tan extraña, y que le pagaría lo que fuera.

Al cabo de 10 minutos de su visita por su propia ciudad, se dio cuenta de que todo era igual, no había nada diferente de lo que ella recordaba y que ni siquiera olía distinto. Al pasar por delante de la redacción donde trabajaba Cal decidió entrar y ver si él estaba allí, y sorpresa, si que estaba. Como siempre estaba sentado en su mesa, la última a la izquierda con una taza de café de la maquina. Sophie se acerco y le toco la espalda para que se girara, y al girarse él hizo una cara de sorprendido.
Ella se sintió rara, como si en verdad a quien sonreía Cal, no era ella. Al cabo de unos segundos se dio cuenta que detrás suyo había una chica idéntica a ella, que era quien hablaba con Cal. Sophie quiso experimentar y levanto el brazo derecho hacía arriba, y su clon casi al mismo tiempo hizo exactamente el mismo movimiento. Ella supuso que estaba en una realidad paralela.

Final múltiple

Primer final:

Sophie corría cogida de la mano por Feliciano, según él para poder correr más. El tiempo le parecía que pasaba lentísimo, ya que aún no veían a Cal ni a Garbon por ningún sitio, solo veía arboles y más arboles. Por fin vio a Cal tirado al suelo, parecía muerto pero ella se dio cuenta de que solo tenía un golpe en la cabeza y estaba desorientado. En cambio, Garbon, estaba tirado boca abajo con un charco de sangre que le salía desde su vientre i se iba extendiendo cada vez más. Su perro Hitler estaba sentado a su lado, mientras le lamia la cara y parecía darse cuenta de que su amo ya no respiraba. Feliciano estaba ya con Cal encima de sus piernas dándole golpecitos para que despertara y les contara lo que había pasado. Al despertarse pidió que le llevaran con el médico del pueblo para que le cosiera la herida de la cabeza que no paraba de sangrar. Fueron hasta el pueblo ayudando a Cal a caminar, y al llegar al hotel los dueños los ayudaron a localizar al médico, que en 5 minutos apareció en el hostal. Al haberle curado la herida, todos le pedían una explicación a Cal, y él empezó con la historia.

-Me encontré con Garbon, quien me suplico que lo ayudara a morir, pero yo no quería hacer eso, no era capaz de apretar el gatillo para otra persona, ni sabiendo que él estaba sufriendo por vivir-hizo una pausa para poder quitarse las lagrimas de la cara- pero entonces él se volvió loco, y me dio un golpe en la cabeza tan fuerte que me tiro al suelo, y para defenderme tuve que dispararle, pero no para poder ayudarlo a morir…



Segundo final:

Cuando llegue por fin a mi piso después de la curiosa historia que había vivido en Puerto Fake, solo tenía ganas de ponerme debajo de la ducha, y dejar que el agua bajara por mi cuerpo un poco sucio después de tantos días sin tiempo para mí. Entonces cuando estaba en el momento más placentero de todos los tiempos sonó el teléfono. Cuando llegue a cogerlo ya habían colgado, y vi que era Cal.

Lo llame para que me contara lo que había pasado tan importante en esa hora que nos habíamos separado. Me dijo que había ido a su redacción antes que al piso, para poder pasar las fotos que había hecho, y que se encontró con todo el mundo recibiéndolo y riéndose de él. Entonces me conto que todo lo de Puerto Fake era una broma de nuestros jefes, que ni siquiera existía ese nombre. Las personas que estaban en ese pueblo eran simples actores que habían contratado, y que Feliciano solo había ido para poder reírse más cuando viera nuestras caras al enterarnos de todo esto. Lo que más me preocupaba es que mi padre hubiera aceptado a todo esto, incitándome a ir a ese Puerto Fake. Entonces lo llame, y me dijo que no sabía nada de todo esto, y parecía muy furioso así que decidí ir a la redacción de Cal donde todos me esperaban para pedir una simple explicación, pero la explicación más simple que recibí fue que solo querían pasar un buen rato y divertirse un poco, ya que en esa época no había mucho trabajo en ningún sitio. Pero una cosa de las más raras era que me estaban pagando para reírse de mí, lo encontré un poco tonto la verdad.

martes, 29 de diciembre de 2009

Diez años antes


Sophie salía de su clase de ciencias cuando se encontró a su amigo Cal delante de la puerta esperándola para enseñarle su nueva cámara réflex de 3 mega píxeles y con zum. La primera cámara que se compraba Cal con su propio dinero, ya que las otras cámaras eran un poco malas porque sus padres no entendían de estas cosas. Sophie quedo perpleja después del flash que incorporaba esa preciosidad según Cal, los dos se fueron hasta la cafetería del instituto para tomar una Coca-cola después del duro día que habían pasado. Cal empezó a contarle que una chica de su clase de historia le había pasado un papelito en el que le pedía para salir esa noche a tomar algo en un pub que estaba cerca de su casa, y que él había aceptado. Sophie empezó a reírse de él i decirle que era un chico fácil.

Feliciano ya estaba en la universidad, haciendo el último curso para poder salir directamente a alguna comisaria de prestigio, debido a sus excelentes notas (como no, todo sobresalientes). Al salir de la universidad, a diferencia de Sophie nada ni nadie le esperaba, cogió su Fiat punto y se fue hasta su piso en donde se encerró en su habitación para repasar lo que había hecho en clase durante el día. Su madre no estaba, como cada tarde debía estar bebiendo en algún bar.

Cal esa noche salió con su “amiga con derecho a roce” de la clase de historia. Fueron al pub “Las brujas” donde tomaron unas patatas bravas de aperitivo con unas cervezas. Su amiga Amber le contó que tenía 17 años, y que estaba interesada en que le hiciera alguna sesión de fotografías. De repente, en el pub entró Feliciano, eran más de las 12 i cogió a una mujer por el brazo y se la llevó mientras ella desorientada, no sabía ni hacia donde iba. Esa mujer era su madre Catherine, una borracha de la cual no quería saber nada más que sus ayudas para pagar la universidad. Así que cada noche la iba a buscar para que durmiera en casa.

Sin saberlo, Feliciano i Cal se habían visto 10 años antes de encontrarse en la historia de su vida.

Diez años después


Después de 10 años de resolver el caso y volver a su ciudad, Sophie, Cal y Feliciano se habían echo tan amigos que cada miércoles quedaban para ir a comer en el bar de la esquina de la comisaría. Cal continuaba haciendo fotos, pero ahora le iba mejor que nunca después de hacerse famoso con el caso. Sophie Deutiers seguía son su trabajo de criminóloga y sin ninguna alteración, y Feliciano tenía mucha más fama de la que ya tenía en la comisaría. Uno de los miércoles que quedaron Sophie les explicó que había hablado con uno de los antiguos habitantes de Puerto Fake, y que ahora ya vivía en Alemania, pero que aún seguían teniendo problemas con la mujer que también era un experimento de los nazis.

Los tres amigos decidieron viajar a Alemania para visitar a las personas con las cuales habían pasado la historia más especial (en todos los sentidos) de su vida. Al reunirse con muchos de los habitantes del pueblo (ahora ya felices) se enteraron de que la mujer estaba encerrada en una habitación en la cual solo podía hablar y escuchar porque tenía los ojos tapados para no poder incitar a suicidarse a nadie. Sophie estaba indignada por lo que le estaban haciendo, ella sabía que aquella mujer era buena y que nunca podría matar a nadie. Entonces decidió ir al psiquiátrico en el que estaba encerrada, y allí pidió para poder hablar con ella. Cal y Feliciano estaban completamente en desacuerdo con su amiga, ya que ellos eran el sexo débil y estaban muertos de miedo…

domingo, 20 de diciembre de 2009

Yo autor


Hola, me llamo Francisca Solar, nací en Chile hace sólo veintitrés años y tengo muchas cosas que decir a este mundo. Estoy licenciada en periodismo y soy una futura estudiante de Pericia Criminalística. Me he dado a conocer gracias a mi publicación en internet de El Ocaso de los Altos Elfos, que es un fanfiction inspirado en la saga de Harry Potter, ya que habla sobre sus aventuras. En mi web recibí más de 50.000 visitas.


Cuando era pequeña fui una lectora compulsiva desde los cinco años, y siempre he dicho que quiero construir historias que sean una sorpresa constante, que no lo expliquen todo, que dejen al lector algún cabo suelto… Y así lo he intentado hacer en mi libro, llamado La séptima M. Trata sobre tintes paranormales y criminalísticos. Es una novela electrizante que no podréis dejar de leer y que, como a sus propios protagonistas, os dejará marcados.


Mi última novela va dedicada a los más pequeños con un estilo directo, que también puede gustar a mis lectores más creciditos. La novela se llama Igual a mí, distinto a ti relata la historia de dos hermanos gemelos que son casi idénticos y comparten su día a día juntos. Sin embargo Benjamín tiene una pequeña diferencia que lo hace distinto a su hermano y a muchos otros niños. Pero eso no impide que su gemelo sienta que los dos son y serán siempre iguales.


Esta novela la he hecho con un tono íntimo y profundo, y para desvelar la complejidad de ser diferente y explorar lo que significa para una familia que uno de los suyos tenga Síndrome de Down.
Prometo que voy a continuar escribiendo libros.

¿Por qué he escogido este libro? ¿Qué me sugiere el título?


He escogido este libro porque me gustan las novelas extrañas y de miedo, de esas que tienes que descubrir algo que sabes que aunque no lo veas como en una película tú te lo estas imaginando en tu cabeza y eso hace que de más miedo aun ya que los personajes pueden ser como tú quieras. Antes de escoger esta novela había leído otros libros de este tipo como La chica que soñaba con una cerilla y un bidón de gasolina y me gustó mucho y esta es otra razón por la que lo he escogido. Otra razón que me ha ayudado ha sido ver que la escritora tenía un nombre sudamericano y eso significa que seguramente esta en versión original, quiero decir que no ha sido traducida desde otro idioma como muchos de los libros que leemos.


El título me sugiere intriga, porque si solo has leído la sinapsis puedes imaginar que habrá otra persona que morirá o se suicidara en las mismas circunstancias que las otras 6 M, y entonces es cuando se despertaron las ganas de saber quién era esa séptima M, o si solo era el título y en verdad nadie más moría. Espero que este libro me haga olvidar de donde estoy, los problemas y los exámenes y que pueda ir para sentir como si la historia me pasara a mí y yo estuviera ayudando a Sophie a descubrir lo que pasa en Puerto Fake. Eso es lo que me gusta hacer mientras leo.

Comienzo de la imaginación

No era posible observar el sutil espasmo de su cuerpo desde tan lejos. Lucía se erguía a medio kilómetro del testigo, justo al otro lado del barranco, lo que imposibilitaría a un humano…
intentar impedir que el hombre encapuchado la tirara barranco abajo. Él intento amenazar gritando al hombre encapuchado que tenía un arma, pero ni se dio cuenta. Entonces fue cuando se le ocurrió tirar un tronco pequeño de árbol desde el otro lado del barranco, al resonar el estruendo el hombre encapuchado se retiro rápidamente y dejó caer a Lucía al suelo. Él había seguido a Lucía desde la cafetería de al lado de su casa, ya que se dio cuenta de su parecido con él. Ella no se había dado cuenta. Al llegar al lado de Lucía la vio tirada al suelo, un poco confusa de lo ocurrido y pensó en llamar a una ambulancia pero enseguida vio que no era para tanto. Ella le pregunto porque estaba allí, y porque toda su cara era muy parecida. Él no supo responder a ninguna de sus preguntas, así que la invito a tomar un chocolate caliente y empezar a hablar para descubrir el fenómeno que estaban presenciando. Al llegar el chico se presentó:

-Hola me llamo Cal Tomphson, y tú?

-Hola, me llamo Sophie De la Vega. Primero muchas gracias por haberme salvado de ese señor, y en segundo lugar, ¿dónde naciste?

-Yo nací en un pueblecito llamado Puerto Fake, al sud de chile- Cal respondió sin ningún preámbulo.
-No puede ser! (exclamo ella) Yo también! ¿Que día si se puede saber?

-El 23 de octubre de 1883- él ya esperaba una respuesta similar…
-Esto ya no es coincidencia… yo también. A mí me dijeron que tenía un gemelo, pero que a la hora del parto nació muerto- enunció Sophie.